Seleccione los siguientes títulos para consultar más información.
La lactancia materna en México se mantiene en niveles bajos, con 32.4% de niños que la reciben de manera exclusiva durante los primeros 6 meses de vida, a pesar de que ese alimento disminuye el riesgo de enfermedades, incluida la obesidad y diabetes, así como algunos tipos de cáncer. Existe la evidencia científica de que la lactancia materna también reduce la probabilidad de muerte de los bebés en el primer año de vida y se asocia a un mejor desarrollo cognitivo y coeficiente intelectual a largo plazo. Para que sea apropiada se debe ofrecer de manera adicional a la lactancia materna a demanda, la cual se debe mantener con tomas frecuentes, hasta los dos años o más.
Esta práctica también tiene beneficios para las madres, pues les ayuda a una mejor recuperación después del parto, disminuye el riesgo de hemorragia y depresión posparto. También baja el riesgo de cáncer de ovario y mama, diabetes tipo II, hipertensión, ataques cardíacos, anemia y osteoporosis.
Además de fomentar la alimentación al pecho materno, la guía para la lactancia materna, elaborada por el IMSS y en colaboración con la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), tiene el objetivo de bajar la prevalencia en el consumo de fórmulas lácteas e informar sobre la forma correcta para introducir la alimentación complementaria. La alimentación complementaria inicia a los seis meses de edad de los bebés, cuando sus necesidades de energía y nutrientes empiezan a ser superiores a lo que la leche materna le puede aportar; y termina a los 12 meses con la introducción del menor a la dieta familiar.
Se debe mantener buena higiene en el manejo de los alimentos, ofrecerlos a los bebés en pequeñas cantidades y aumentarlas a medida que el niño va creciendo; también se debe aumentar gradualmente la consistencia y variedad de los alimentos, como el número de comidas: dos a tres al día para los lactantes de 6 a 8 meses, y tres a cuatro al día para los de 9 a 23 meses, con uno o dos refrigerios adicionales si fuera necesario.
La OMS ha propuesto que para el 2025 al menos el 50% de los lactantes sean amamantados de forma exclusiva durante los primeros 6 meses de vida; México se encuentra lejos de este objetivo: actualmente, solo el 34.2% de los bebés menores de 6 meses en México reciben lactancia materna exclusiva, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT 2021-2023). Al mismo tiempo, un 27.2% son alimentados con fórmulas comerciales u otros líquidos desde los primeros días de vida (ENSANUT 2022). Esto es preocupante, porque a pesar de que el 95% de las mujeres alguna vez amamantaron, una tercera parte sigue amamantando de forma exclusiva a los 6 meses. Estos datos sitúan a México como uno de los países de América Latina con prevalencias más bajas de lactancia materna.
Otro de los indicadores importantes sobre lactancia materna recomendados por la OMS es el inicio temprano del amamantamiento, esto es iniciar la lactancia materna en la primera hora de vida, “la hora de oro”. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) del 2018, menos de la mitad (47.7%) de los lactantes en México empieza a mamar durante la primera hora de vida, a pesar de que la OMS lo recomendó desde hace más de 30 años.
A nivel internacional se ha comprobado que el aumento en la práctica de la lactancia materna puede impedir que cada año mueran aproximadamente 823,000 infantes y 20,000 muertes maternas (por cáncer de mamá). Aún con todas las evidencias a favor de la lactancia materna, parece que la práctica médica ha olvidado el hecho de que el ciclo reproductivo no termina con el embarazo, sino que incluye de manera vital el amamantamiento. Se ha caído en el error de suponer que los sucedáneos de leche materna pueden sustituirla sin acarrear consecuencias perjudiciales. Infinidad de evidencia científica confirma el hecho de que no amamantar tiene efectos adversos a corto y largo plazo en la salud de los niños, de las mujeres y del planeta.
A través del Sistema de Vigilancia Epidemiológica Convencional, se han “, se han registrado 341,492 casos de Enfermedades diarreicas agudas en niños menores de cinco años, ala semana 28 del 2025.”
En México se tiene registro de infección por dengue disponible al público por medio del boletín epidemiológico de la Dirección general de epidemiología mediante el Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (CONAVE) iniciando el 15 de febrero de 1981, involucrando a los estados de Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luis Potosí, Hidalgo, Veracruz, Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Chiapas, Oaxaca, Nayarit, Guerrero y Sinaloa siendo este último el único con una subdescripcion de 5 localidades aledañas a Culiacán presentándose hasta 1981.
Para conocer el comportamiento del Dengue la división de epidemiologia del IMSS durante el período de 1979 al 2001 decidió realizar un estudio ecológico utilizando las tasas de incidencia anuales a nivel institucional y por delegación, como resultado se encontró que los primeros casos en población derechohabiente se presentaron en 1979; durante ese año se registraron un total de 9,721 enfermos en 9 delegaciones: Chiapas, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tamaulipas, Veracruz Norte, Veracruz Sur y Yucatán, para una tasa de 48.7 por 100,000 derechohabientes.
En 1980 ocurrió la mayor incidencia registrada a nivel nacional y se agregan a la lista de delegaciones notificantes: Tabasco, Campeche, Morelos, Nuevo León y Coahuila. Durante los años siguientes, aunque en forma insidiosa la expansión de la epidemia fue constante, de manera que actualmente se han presentado brotes en al menos 22 de ellas. En 2014 se efectuó un estudio binacional a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México buscando la relación entre casos nuevos de dengue en el condado de Yuma y el viaje entre los pacientes a Sonora, en donde se determinaron las características epidemiológicas de dicha población, evaluaciones de la casa y el patio fueron realizadas para identificar durante septiembre - noviembre 2014, un total de 52 laboratorios confirmados.
Se identificaron casos de dengue en San Luis Río Colorado, Sonora: 30 (58%) por detección de NS1, 21 (40%) por detección de DENV IgM, y 1 (2%) por NS1 y RT-PCR. 32 (62%) pacientes eran mujeres; La mediana de edad fue 34.5 años (rango = 0 a 76 años). Las fechas de comienzo del síntoma variaban del 20 de septiembre al 13 de noviembre. Los signos y síntomas más comunes notificados fueron fiebre (100%), dolor de cabeza (98%), artralgia (92%) y mialgia (90%); 3 pacientes (6%) cumplieron con la definición de caso de dengue hemorrágico y 11 (21%) fueron hospitalizados, el porcentaje de pacientes que viajaron a Sonora previo a la infección llego al 66%.
El dengue es una enfermedad infecciosa sistémica, de etiología viral, transmitida por los mosquitos del género Aedes, siendo esta una de las principales enfermedades virales trasmitidas de forma vectorial y con gran repercusión epidemiológica a nivel mundial.
Tipo de virus. El virus del dengue pertenece al género Flavivirus de la familia Flaviviridae, a nivel molecular cuenta con 5 serotipos (DENV 1-5), en cuanto a las características del genoma viral encontramos una partícula esférica de 40-50 nm cubierta por una envoltura de glicoproteína y ARN mensajero de sentido positivo único de 11 kilobases de longitud.
Características del genoma viral DENV: Desde su aislamiento en 1943 se han encontrado 4 serotipos de DENV (DENV 1-4), sin embargo, se agregó un quinto serotipo (DENV 5) anunciado en octubre de 2013 después de su aislamiento en 2007 en Malasia, de los anteriores todos son causantes de dengue sin embargo se han asociado a mayor severidad a los serotipos 2 y 3 siendo estos los principales responsables de mortalidad a nivel global.
Distribución geográfica: La distribución geográfica de los serotipos es global, encontrándose los serotipos 1 al 4 en Latinoamérica y específicamente en México en donde desde el 2008 el Departamento para la Vigilancia Epidemiológica y Virológica del InDRE imple mentó un nuevo algoritmo de diagnóstico del dengue, que utiliza la Red de Laboratorios Estatales de Salud Pública identificando los serotipos a partir de muestras positivas a la proteína NS1 por en sayo inmunoenzimático (ELISA), en 2009 se analizaron 6,336 muestras de suero encontrándose un 83% de coincidencia de casos con un DENV 1 positivo, un 16.67% positivo para DENV 2 y menos del 1% positivos para DENV 3 y 4 presentando una mayor distribución por entidad federativa en los estados de Jalisco, Michoacán y Colima.